Los Guardavidas se quejan por la falta de convocatoria para la reválida en Paraná
Los profesionales Guardavidas denuncian una situación irregular al momento de contratarlos, especialmente en las temporadas de verano y que afecta la seguridad de los vecinos y turistas que buscan recrearse en los balnearios públicos y privados como en los clubes deportivos y sociales.
Ahora “la gota que ha rebalsado el vaso” es la incertidumbre por la ausencia de convocatoria de la Municipalidad de Paraná para rendir la reválida –tal como ordena la Ley Provincial- y así estar habilitado para ser contratado.
“Este año Paraná no tiene reválidas, que es la prueba anual que rendimos para renovar nuestras libretas de trabajo para que nos contraten”, se quejó una Guardavidas, quien hizo notar que, por ejemplo, otras localidades de la provincia ya tienen fecha confirmada para la reválida como son los casos de Concepción del Uruguay (2 y 3 de octubre), Chajarí (16 de octubre), Concordia (23 y 24 de octubre), Diamante (28 y 29 de octubre) y La Paz (14 de noviembre).
“La verdad que acá (por la Municipalidad de Paraná) hay cuatro personas que están en blanco hace más de diez años, por lo que sabemos, el resto es monotributista”, es otra de las quejas recurrentes.
Para trabajar en Paraná se es seleccionado “a dedo por estas cuatro personas, con todo lo que ello implica”, advirtieron los Guardavidas ya cansados de tanto manoseos y atropellos, además de innumerables situaciones indignantes que ya no están dispuestos a seguir tolerando.
Ante la falta de reválida, los Guardavidas sospechan que la Municipalidad de Paraná quiere instrumentar una libreta propia, contraria a la Ley Provincial de modo de tornar aún más esta situación como si fuera un coto de caza.
“En Paraná no se contrata a nadie, salvo a esas cuatro personas que tiene cargo permanente. Los demás somos monotributistas lo que implica que no tenemos antigüedad, no nos reconocen categorías ni nada”, es otra de las quejas recurrentes.
Estas cuatro personas –denuncian los Guardavidas- “son las que repartan las plazas de trabajo. Plazas de trabajo que hacen que se tenga que pagar monotributo, facturar lo trabajado en diciembre, enero, febrero, marzo, para recién con suerte ¡cobrar en abril!”, denunciaron otra inequidad casi de explotación que torna difícil, cuando no imposible, que un profesional esté casi siete meses sin cobrar sus honorarios por los servicios prestados al Estado.
La otra denuncia que realizan es que, al estar la forma de contratación casi monopolizada por cuatro individuos, quienes no acepten “sus condiciones” siempre quedan sin chances de trabajar, incluso durante todo el año porque también quedan marginados de posibilidades laborales vinculadas a actividades náuticas o acuáticas o cuando se hacen regatas, por ejemplo.
“En Paraná la selección de guardavidas funciona como un kiosco desde hace por lo menos diez años”, describieron con angustia y dieron cuenta que si las autoridades repasaran el listado de quienes fueron contratados, detectarán cómo han beneficiados a familiares y allegados de los propios funcionarios que toman esas decisiones.
La otra situación está vinculada con los controles a los clubes de la capital provincial. Denunciaron que algunos contratan a un solo guardavidas cuando tienen tres piletas.
“Todo eso es visible. Y otras entidades colocan un cartel que dice, si usted no sabe nadar, no se meta a la pileta porque no hay guardavidas”, redundan. “Nadie sabe cuántas piletas hay ni cuántos profesionales son contratados y en qué condiciones”, es otra queja que refleja la anarquía que prevalece en el sector.
“Quienes tienen la suerte de ser contratados comienzan a trabajar en diciembre, pero cobran –con viento a favor- recién en abril o mayo. Así es imposible sostener el servicio”, advirtieron; a la vez que señalaron que tampoco es casual que no se organicen capacitaciones. “Quienes sí nos capacitamos lo debemos hacer en otra provincia”, ejemplificaron.
“Paraná, capital de la provincia, no tiene reválida. Y quieren confeccionar una libreta habilitante propia, al margen de la ley provincial”, resaltaron para dar cuenta que si las autoridades quisieran hacer todo más transparente, deberían auditar a esas cuatro personas que manejan el tema a nivel municipal. “La corrupción viene de la mano de personas que son visibles, no de personas que nadie conoce. En este ámbito todos sabemos quiénes son”, indicaron los Guardavidas que esperan que las autoridades no sigan en la pasividad ante un servicio que es esencial.
Fuente: ANÁLISIS.