Laura Vasquez: «La ampliación del Parque Urquiza ya estaba presente hace mas de 30 años»

La arquitecta paranaense Laura Vasquez, ademas historiadora de la ciudad, dio su opinión sobre el tema del loteo del predio frente al Patito Siriri: » Quien no conoce y/o desconoce la historia está condenado a equivocarse.»

«Hasta 1986, el código vigente no autorizaba el uso residencial, definiéndola como Área de Interés, que según el mismo Código eran zonas de la ciudad que debían ser más profundamente estudiadas.» expresa la arquitecta Laura Vasquez.

«Cuando el predio es adquirido por sus propietarios actuales, los mismos empiezan un fuerte proceso gestión/presión para ir obteniendo de cada gobierno municipal ordenanzas y aprobaciones que lo llevaron al momento actual. «

«El primer paso fue lograr el cambio de uso a residencial , hasta llegar a un loteo aprobado con condiciones edificación equivalentes a su entorno. Es decir que la visión de preservación paisajista y ampliación del Parque Urquiza ya estaba presente hace mas de 30 años, visión que fue siendo abandonada por los sucesivos gobiernos de la ciudad, con fundamentos no suficientemente claros. «

«También es importante aprender de la historia de la ciudad, de sus mejores capítulos: El Parque Urquiza no nos fue dado así mágicamente como un legado de la naturaleza. Fue obra de varias generaciones que siguieron una visión y un plan preestablecido, un modelo de encuentro de la ciudad y el río. «

«Toda la tierra que actualmente ocupa el Parque Urquiza, era inicialmente privada y presentaba una geografía de barrancas naturales con áreas fuertemente intervenidas por la actividad minera,al igual que la que hoy nos ocupa. Mediante donaciones, y operaciones de compras se fue conformando ese fenomenal patrimonio público. «

«Y no sólo no eran tierras fiscales sino que muchas de ellas estaban ocupadas y requirió acciones de desplazamientos y reubicaciones. Y un gran esfuerzo de obras, de diseño y financiero. Pero quien no conoce y/o desconoce la historia está condenado a equivocarse.» concluye Vasquez.