Entre Ríos registra una ocupación del 73% de las camas de terapia intensiva

El Gobierno de Entre Ríos informó hoy que la provincia registra una ocupación del 73 por ciento del total de las camas instaladas en las terapias intensivas (UTI) en los diferentes efectores sanitarios, en el «momento de mayor crecimiento de casos».

En ese sentido, 15 de los 17 departamentos provinciales tienen la calificación de «alto riesgo» (Colón, Diamante, Concordia, Gualeguay, Gualeguaychú, La Paz, Paraná, Uruguay y Villaguay, entre otros) y los dos restantes (Feliciano y Federación) de «mediano riesgo» epidemiológico.

En conferencia de prensa, la ministra de Salud, Sonia Velázquez, pidió «disminuir la movilidad e interacción social para bajar imperiosamente la cantidad de casos y así descomprimir el sistema de salud, para tener mayor capacidad operativa y atender a las otras patologías».

«Durante el fin de semana vivimos los momentos de mayor tensión en nuestro sistema de salud», aseguró la funcionaria, y resaltó que se trata del «momento de mayor crecimiento de casos».

Por su parte, el director entrerriano de Epidemiología, Diego Garcilazo, remarcó que el 73 por ciento de las camas de las UTI se encuentran actualmente ocupadas, lo que «pone en de manera muy importante los servicios» de hospitales.

Asimismo, señaló que en general, la provincia se encuentra «con alto riesgo (de contagios) desde mitad de marzo de este año», con «más de 400 casos por día», y que se registró un crecimiento de más del 20 por ciento de los casos en los últimos 14 días, de los cuales «entre el 2 y 3 por ciento requieren UTI».

En tanto, el secretario de Políticas de Salud y Bienestar provincial, Guillermo Zanuttini, afirmó que actualmente «no se puede brindar con calidad la respuesta que requiere cualquier sujeto o persona» que se presente en un efector sanitario.

«Se quintuplicó la cantidad de pacientes de Covid-19 que se encuentran en la UTI entre marzo y abril, y las camas son un recurso finito que no podemos ampliar que se sostiene con recursos materiales pero también con recurso humano, clave para brindar respuesta de calidad», enfatizó.

Zanuttini explicó que una persona infectada con una de las nuevas cepas «tiene un desenlace de la enfermedad más rápido, donde supera etapas y acelera la necesidad de respuesta de los servicios de internación previos a la terapia, que también comienzan a saturarse».

Y convocó a «ser solidario» ya que la sociedad «tiene enormes niveles de desigualdad» y «todos debemos trabajar para eliminar esas desigualdades injustas que muchos están sufriendo».

Fuente: Télam.